martes, 17 de abril de 2012

QUIMILÍ: UNA CIUDAD DESCUIDADA


Con la llegada del Gobernador Gerardo Zamora se percibe que el aspecto del centro de la ciudad ha cambiado, como así tanbien algunos paseos públicos que suelen permanecer tapados de yuyo y basura durante largo tiempo.
Vemos alegremente que los cordones de las calles están pintados de blanco y que la cinta asfáltica se presenta demasiado limpia, como pocas veces; al igual que se advierte una buena iluminación; es decir que la llegada del Gobernador nos hace felices a todos; porque además de sus importantes anuncios, nos da la posibilidad de observar a una parte de Quimilí algo más presentable y disfrutable.¡Como corresponde!.



NO TODO LO QUE BRILLA ES ORO:

Pero el contraste y lo que genera mayor tristeza aún, es la realidad que se vive en los barrios un poco más distantes, ya que el abandono es notorio y los servicios públicos un tema que las autoridades locales deben tratar con seriedad.

Los meses de enero, febrero y marzo no fueron diferentes a los años anteriores donde las calles de tierra se convierten en “colchones” de tierra , con enormes pozos que perjudican cualquier maniobra, además de un escaso riego que acentúa las enfermedades respiratorias en niños y adultos.

La recolección de residuos, es un servicio que también debe ser mejorado en los barrios, porque su frecuencia es de dos veces por semana y muchas veces no pasan, por cuestiones que nunca trascienden, además de aquellas ocasiones en las que la lluvia hace imposible su recorrido.

Normalmente no se cortan los yuyos de los espacios públicos, y es un tema sin solución la basura que la gente deja enfrente de sus hogares porque limpió su terreno o su patio.

Puedes ir personalmente al municipio para solicitar que se encargue de levantarla, llamar telefónicamente, o esperar a que los encargados pasen algún día y el resultado es casi siempre el mismo; algunos vecinos deciden quemar la basura, otros contratan a un tercero para que se ocupe de recogerla, o como sucede en muchos casos, los despojos permanecen en el mismo lugar por mucho tiempo.

En definitiva estas cosas son las que crean malestar en las personas y aunque las quejas no se expresan a viva voz como en otras ciudades, seguramente lejos está de significar conformismo, como sostienen algunos. Para mi es IMPOTENCIA.

Me parece poco productivo alegrar la cara del pueblo solo en ocasiones excepciónales porque lo que se hace es esconder la basura debajo de la alfombra, e intensificar trabajos que se podrían realizar de manera planificada, organizada y abarcativa durante todo el año.

Ojalá esta estrategia de conformar a corto plaz, cambie por otra más sólida, que continúe en el tiempo y que beneficie al conjunto de la población. Ojala los servicios públicos se cumplan en toda la comunidad y ojala se comience a construir un Quimilí que incluya a todos.

Firma: Roberto Gómez
Vecino del Bº San Martín

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