SE JUBILÓ LA SEÑO GLADYS

Se Jubiló la Seño Gladys ROMERO DE LÓPEZ

                Con muchas emociones, en medio de muy buena compañía y en consecutivos momentos inolvidables, el sábado 02 de junio de 2.012, en el salón que la Soc. Rural del NE Santiagueño tiene en su predio, se realizó la cena despedida por la Jubilación de Gladys.

Una Docente que inició su carrera en las escuelas de el Lote El 90,  Fisco Chico y posteriormente en Campo Gallo; continúo en la Escuela Nº 18 y 19, Villa de Mayo y Los Polvorines (Provincia de Bs. As.); más tarde en la Escuela de Tres Isletas en la provincia del Chaco y finalmente sus últimos 20 años de ejercicio, en las Escuelas 198 Provincia de San Luis, 871 Virgen de Lourdes y 1214 Santa Dorotea. En esta última se despidió.

Gladys dijo en su mensaje, que la docencia le ofreció la posibilidad irremplazable de compartir con semejantes y sumar amigos. Sintió que con esta profesión la vida le dio la oportunidad de ser educadora y formadora de niños, de lo que está muy orgullosa y agradecida, a la vez agregó que la carrera docente lleva implícita satisfacciones y alegrías pero también renunciamientos.

En otro momento de su discurso manifestó que después del deber cumplido, espera ahora con mucha alegría el tiempo de descanso, que estima le permitirá disfrutar a pleno de su familia, de sus nietitos, porque no de sus amigos y concluir algún proyecto que le haya quedado en el camino.

Sin duda que uno de los momentos más culmine de su mensaje fue cuando agradeció a Dios por haberle dado salud, trabajo, una linda familia y muchos amigos; pero especialmente le agradeció a su madre Doña “Enca”, quien estuvo presente en la fiesta, por ser ella el sostén y puntal que le ayudó a superar las dificultades para poder alcanzar el SUEÑO de ser MAESTRA.

Agradeció infinitamente a directivos y colegas de la Escuela 1214 Santa Dorotea quienes le organizaron tal despedida. En el evento se mostró un video con fotografías que testimoniaron su andar por la vida y numerosos reportajes de salutaciones y agradecimientos, pero por sobre todo los que mas se notaron fueron los que hicieron alusión a la excelencia en el rol de la gran compañera que fue.

Todos los invitados pudieron saborear riquísimos platos dulces y salados, acompañado del calor hospitalario expresado por sus propios compañeros al momento de atender cada mesa, que hacían sentir muy a gusto.

En el agasajo, Gladys se vio muy contenta, rodeadas de varios afectos, aunque algunos por razones varias no pudieron acompañarla como Víctor Cativa y su esposa Silvia Campos, quienes se hicieron presente con una emocionante carta leída en la ocasión.

Gladys deja un recuerdo imborrable con esa noble y digna tarea de educar. Que Dios la acompañe a vivir una merecida jubilación.